Lo inesperado nos sorprende porque nos hemos instalado con gran seguridad en nuestras teorías, en nuestras ideas y, éstas no tienen ninguna estructura para acoger lo nuevo. [Y lo más paradójico es que] Lo nuevo brota sin cesar; nunca podremos predecir cómo se presentará, pero debemos contar con su llegada, es decir contar con lo inesperado. Y, una vez sobrevenga lo inesperado, habrá que ser capaces de revisar nuestras teorías e ideas (...)”.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Comparte tus comentarios aquí. Nos interesa tu opinión!